"PRÍMULA PRIM"
Catalina González Vilar
Anna Castagnoli
Cuatro Azules, 2018
Una historia sensitiva, dulce… con aroma y sabor a repostería y a brisa de primavera… con el calor de la tradición, de los pasteles y dulces bien hechos, elaborados con amor y cariño… que invita a recrear lo cotidiano con un toque de magia y mucha fantasía, pero que a la vez despierta cierta nostalgia por las cosas de siempre, por la sencillez y lo tradicional.
El primer día de primavera en la Pastelería de los Prim, la pastelería más deliciosa y tentadora de Oldón de Arriba, justo el día en que Prímula al mirarse en el espejo decide ponerse a dieta, acontece algo extraordinario. El Señor Prim le regala a su esposa una caja de bombones muy especiales; unos bombones delicadamente transparentes, tal y como si estuviesen hechos de cristal y con un aroma exquisito a brisa y flores de primavera. La fama de estos inusuales dulces se extiende por el pueblo e incluso traspasa fronteras, así que nuestros protagonistas se ven obligados a dejar de lado los dulces tradicionales para hacer frente a la fuerte demanda. Pero como todo gran éxito tiene un precio, este caso no es una excepción y los protagonistas de esta historia no están dispuestos a pagarlo. Así que el relato da un giro inesperado reivindicando el valor de la sencillez y lo tradicional.
Una historia que nos transporta a las pastelerías de nuestra infancia, que es capaz de hacer revivir el aroma dulzón de los merengues, el calor de los cruasanes recién hechos… con un lenguaje sencillo y unas delicadas, coloridas y sugerentes ilustraciones nos recuerda a los cuentos tradicionales de final feliz, en el cual, los protagonistas son capaces de renunciar al éxito a cambio de no perder la felicidad y la sencillez que reina en sus vidas.
Una historia sensitiva, dulce… con aroma y sabor a repostería y a brisa de primavera… con el calor de la tradición, de los pasteles y dulces bien hechos, elaborados con amor y cariño… que invita a recrear lo cotidiano con un toque de magia y mucha fantasía, pero que a la vez despierta cierta nostalgia por las cosas de siempre, por la sencillez y lo tradicional.
El primer día de primavera en la Pastelería de los Prim, la pastelería más deliciosa y tentadora de Oldón de Arriba, justo el día en que Prímula al mirarse en el espejo decide ponerse a dieta, acontece algo extraordinario. El Señor Prim le regala a su esposa una caja de bombones muy especiales; unos bombones delicadamente transparentes, tal y como si estuviesen hechos de cristal y con un aroma exquisito a brisa y flores de primavera. La fama de estos inusuales dulces se extiende por el pueblo e incluso traspasa fronteras, así que nuestros protagonistas se ven obligados a dejar de lado los dulces tradicionales para hacer frente a la fuerte demanda. Pero como todo gran éxito tiene un precio, este caso no es una excepción y los protagonistas de esta historia no están dispuestos a pagarlo. Así que el relato da un giro inesperado reivindicando el valor de la sencillez y lo tradicional.
Una historia que nos transporta a las pastelerías de nuestra infancia, que es capaz de hacer revivir el aroma dulzón de los merengues, el calor de los cruasanes recién hechos… con un lenguaje sencillo y unas delicadas, coloridas y sugerentes ilustraciones nos recuerda a los cuentos tradicionales de final feliz, en el cual, los protagonistas son capaces de renunciar al éxito a cambio de no perder la felicidad y la sencillez que reina en sus vidas.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada