"PAYASA EN EL PARQUE"
MARISA LÓPEZ SORIA
CRISTINA PÉREZ NAVARRO
EDITORIAL ABUENPASO, 2018
“Hoy Payasa ha escuchado decir que es diferente y se ha ido inquieta al parque a reflexionar… mientras piensa, Payasa sonríe debajo de su roja nariz y se deja llevar por el misterio de la vida que se manifiesta exultante y extraordinario a su alrededor”
Aceptar que formamos parte de un universo en el que se establecen mágicas e incomprensibles conexiones entre todos los elementos que lo configuran, cuando nos sentimos diferentes, solos, perdidos, sin conocer ni comprender nuestro lugar… cuando nos cuesta ponernos en la piel del otro, incluso observar y gozar de la belleza del entorno en el cual nos encontramos inmersos, no es tarea fácil.
Aceptar que formamos parte de un universo en el que se establecen mágicas e incomprensibles conexiones entre todos los elementos que lo configuran, cuando nos sentimos diferentes, solos, perdidos, sin conocer ni comprender nuestro lugar… cuando nos cuesta ponernos en la piel del otro, incluso observar y gozar de la belleza del entorno en el cual nos encontramos inmersos, no es tarea fácil.
Este álbum nos descubre a través de textos sencillos y luminosas ilustraciones la capacidad de observar desde otra mirada: la naturaleza desde la capacidad de asombro y, al mismo al ser humano, desde la comprensión y aceptación.. Capacidades que constituyen unas de las más valiosas fortalezas del ser humano ante la vida.
Payasa, movida por un sentimiento de incomprensión, busca su sitio en su pequeño universo y decide sentarse en un banco del parque a reflexionar, palabra demasiado abstracta que todavía no comprende muy bien lo que significa pero que le lleva a pasear su vista por el entorno observando lo cotidiano desde el asombro: una hormiga afanosa acarreando con una pipa de girasol, unos jóvenes abrazándose, una flor regalando su fragancia primaveral, una pata regañando a su patito… descubriendo que el amor y la belleza tienen diversos y maravillosos caminos para manifestarse. Observando el entorno, un volcán de emociones se desata en su corazón, lo que le lleva a comprender de forma intuitiva que la naturaleza y el ser humano como parte de ella, es diversa y que la aceptación de esta diversidad, nos enriquece y nos hace fuertes.
“¡Ella misma era prodigiosa! Sin ser igual, estaba trenzada, unida a todo lo que veía… e incluso a lo que no veía e imaginaba”.
Es un álbum que nos habla de la aceptación de las diferencias individuales como elemento que nos enriquece; de la capacidad de mirar la naturaleza desde el asombro y la sorpresa, como fortaleza ante las circunstancias adversas que nos depara la existencia. Un libro, tal vez filosófico, que nos transmite una lección de vida invitándonos a encontrar nuestro lugar en el universo del que formamos parte y, a captar y valorar amorosamente las conexiones que se establecen entre todos los elementos que lo integran.
Un álbum para todo los públicos, porque los más pequeños ya son capaces de sentirse diferentes a los demás, de percibir que tienen gustos, cualidades, habilidades… distintas a las del compañero o amigo, nunca es demasiado pronto para poner palabras a lo que sentimos y a cómo nos sentimos; y para los más mayores, porque este es un aprendizaje de vida que jamás acabamos de completar.
“¡Ella misma era prodigiosa! Sin ser igual, estaba trenzada, unida a todo lo que veía… e incluso a lo que no veía e imaginaba”.